¿Puedes decir 'Grand Central' en una sola imagen?

La luz al final del túnel puede ser una esfera de reloj iluminada. En una señal de que el ferrocarril del Metro-Norte se prepara para celebrar el centenario de la Grand Central Terminal el próximo año, un nuevo logotipo comenzó a aparecer esta semana en las pantallas de visualización en el vestíbulo principal. Se trata de una versión estilizada, pero reconocible al instante del reloj de cuatro caras que corona el stand central de información y ha servido como un punto de referencia para el encuentro impaciente innumerables. Las manos del reloj del logotipo se fijan a las 7:13. Por la noche, que sería el equivalente de 19:13 en un reloj de 24 horas - el año de la terminal se abrió. Michael Bierut y Joe Marianek de la firma Pentagrama diseñó el logotipo. Se utiliza el tipo de letra de Avenir Next, diseñado por Adrian Frutiger en 1988. Se suplanta a un monograma de enclavamiento que ahora sirve como el logotipo, y está destinado a ser utilizado después del aniversario, cuando el "100 Years" la línea quedará cortada ". Al centrarse en lo que es quizás uno de los relojes más famosos de todos, que marcan el paso del tiempo, por un lado, y el comienzo de nuevos viajes por el otro", dijo Randall J. Fleischer, director senior de la vía férrea . Con el debido respeto, sin embargo, el reloj puesto de información no es la imagen gráfica única fuerte, que podría haber sido utilizado. Grand Central presenta muchas caras de los viajeros y para los que vienen en tan sólo experimentar el lugar. Si Metro-Norte había pedido que diseñar un logotipo para el centenario de Grand Central y más allá, ?qué habrías imaginado?; Algo basado en la arquitectura Beaux-Arts de la terminal?; ?Te han convocado a la experiencia de los desplazamientos?; ?O de enhebrar su camino alrededor de la boca abierta turistas que están de pie clavado en el piso de la terminal - la mirada fija, sin duda, el reloj de cuatro caras.

Zara abre su flagship store en la Quinta Avenida (13-03-2012)

El grupo español Inditex abrirá mañana miércoles una nueva tienda de Zara en la Quinta Avenida que pasará a ser la tienda más grande de Estados Unidos de este grupo empresarial.

La tienda está ubicada en el 666 de la Quinta Avenida, frente al edificio de la tienda Cartier. El local, de 3.600 metros cuadrados, estuvo anteriormente ocupado por la tienda de la NBA y fue comprado por la firma española en Marzo del año pasado por $324 millones. 450 empleados atenderán cada una las secciones de la tienda: señora, joven, niño y caballero.

Con la inauguración de esta tienda, Zara aprovechará para lanzar una nueva imagen de la firma. El concepto de la nueva Zara será crear un espacio con muchas diferentes boutiques dentro de la tienda, una tienda muy elegante, transparente y acogedora donde la ropa luce especialmente, según a explicado Pablo Isla, presidente de Inditex.

Esta tienda será la número 8 que Zara abre en Nueva York. La más cercana, situada en la Quinta Avenida con la Calle 54, cederá su espacio a Massimo Dutti otra de las firmas del grupo Inditex.

Zara incorporará en su nueva tienda la última tecnología de pago a través del móvil y con tarjeta sin contacto, por radiofrecuencia.

La primera tienda de Zara fue abierta en La Coruña en 1975 por el empresario textil Amancio Ortega. La expansión de la cadena Zara fue rápida por toda España hasta que en 1985 se funda el grupo Inditex (Industrias de Diseño Textil). En la actualidad, Inditex aglutina las cadenas de tiendas Zara, Zara Home, Zara Kids, Massimo Dutti, Oysho, Bershka, Pull and Bear, Stradivarius y Uterqüe. Amancio Ortega, el fundador de Inditex, es la quinta persona más rica del mundo, según la lista Forbes, con una fortuna estimada de $37.500 millones. Su exmujer, Rosalía Mera, la segunda mayor accionista de Infitex, es la mujer más rica de España.

En la imagen, la actual Zara en la Quinta Avenida que pasará a ser Massimo Dutti.

Sex and the city

Carrie Bradshaw en  Sexo en Nueva York: el número 64 de Perry Street, con su ya mítica escalinata.

Lo que en la ficción se nos presentaba como un edificio de apartamentos es, en realidad, una vivienda única cuya fachada se ha convertido en uno de los enclaves más visitados por los turistas en la gran manzana tras el éxito mundial de la serie.
Eso sí, la fama de esta fachada está compartida con la de justo al lado, la número 66 de Perry Street, que fue la que se usó a partir de la cuarta temporada, no sabemos cuál fue el problema de los productores con los antiguos dueños de la casa que ahora se vende… Inmueble que, por cierto, se está usando más para especular que para usarlo como hogar, pues ya fue vendido el pasado mes de noviembre. No han pasado ni seis meses y sus propietarios ya lo están revendiendo. 650.000 dólares más caro de lo que lo compraron, claro.
Aunque si echamos un vistazo al interior de la casa, poco tiene que ver con los coquetos y acogedores espacios del pequeño apartamento donde Carrie escribía las profundas (ejem) reflexiones de sus columnas.   Y es que todos los interiores de su piso en la serie estaban creados en un plató.

Ya sabéis, si tenéis nueve millones de euros a mano y os apetece bajar y subir cada día los famosos escalones emulando a Sarah Jessica Parker, ésta es vuestra casa. Pero luego no os quejéis si cuando salís a comprar el pan, os encontráis una horda de turistas haciendo fotos a vuestras ventanas o vídeos frikis.

Charging Bull: El Toro de Wall Street

El toro, conocido como Charging Bull se encuentra en Bowling Street y un buen momento para visitarlo y sacarse unas fotos es cuando vayáis al ferry que os lleva a la Estatua de la Libertad, ya que si bajáis por Broadway os lo encontraréis de frente, siempre rodeado de turistas sacándose fotos.
Se trata de una escultura de 3.200 kilos de peso hecha en bronce y que representa la tendencias alcistas de la Bolsa de Wall Street. Ya que en términos de bolsa, a las súbidas se le llama “bullish” (mercado toro), al tratarse de un animal fuerte y que al embestir lo hace hacia arriba, como los gráficos de la subida de la bolsa.
Curiosamente el propietario de la escultura Charching Bull no es el ayuntamiento de Nueva York sino el propio escultor, el italo-americano Di Modica, que invirtió de su propio bolsillo 360.000 dólares y lo instaló frente a la Bolsa de Nueva York en 1989 sin el consentimiento del ayuntamiento.
Actualmente el ayuntamiento de Nueva York lo tiene en régimen de alquiler y fue quien decidió colocarlo en la actual ubicación de Bowling Street.

Bienvenidos al Blog de Nueva York

Bienvenidos al blog para los amantes de NY, os pongo unas imágenes de la ciudad.

Estatua Libertad	Nasdaq
Flaitron Building	Puente Brooklyn